29 de marzo de 2015

Adiós.





















Estoy a tres resacas
del día en que te fuiste
y aun me duermo pensando en ti.
Un poco kamikaze por mi parte
esperar que vuelvas
pero hay que ser muy hijo de puta
para llamarme “mi amor”
sin pretender hacerlo.
Tenías todo lo que odio
pero te gustaba Neruda
y quien olvidaría eso.

Me he aliado con mis demonios
para odiarte de forma torrencial
y arrasar con todo rastro de tu olor.
Espero que ellos cumplan,
yo ni lo he intentado.

Por suerte o por desgracia,
solo te echo de menos cuando no bailo
aunque solo baile cuando no te echo de menos.
Me mantengo a flote
porque alguien tendrá que contarle a la siguiente
lo bien que fingías cuando el barco se hundía -y yo con él-.

Mi habitación ha escuchado más veces “te odio”
que tu nombre.
Y, a lo mejor, en una de esas 
hasta acabo creyéndomelo.

3 comentarios:

  1. Dicen que una mentira dicha mil veces se convierte en verdad. Así que suerte. Repítetelo hasta que así sea.

    ResponderEliminar
  2. Qué lindo.
    http://yonosoychicaporno.blogspot.com/

    ResponderEliminar
  3. Me encanta Elena, es maravilloso... Si ya me gustaban tus primeras entradas, ahora me gustan aún más.

    ResponderEliminar