22 de enero de 2017


Yo no te buscaba,
pero te apareciste perfecto
en una tarde de verano
que traía todos los miedos 
de una niña a oscuras.
Tú eras demasiado,
yo demasiado poco.
Y sabiendo que nunca llegaría 
a estar a la altura
no pude evitar enamorarme de ti.
Que habría sido una locura
haber dejado que te fueras
cuando me abrazas los miedos
protegiéndome de fieras
haciéndome sentir princesa
mientras tu mirada me atraviesa
y me conviertes en tu presa
en un beso que no cesa.
He muerto de amor
cada vez que me he girado
y he chocado con tus pupilas
acompañadas de la sonrisa
que encantaría a mil sirenas.
El momento en que te di mi vida entera
consiguiendo que aún te quiera
cada día un poco más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario